¡ Feliz cumpleaños !
Era costumbre en la villa
que acercándose algún evento,
posaran hombre, mujeres y niños
con el mejor traje del momento.
Ilustres personajes también,
del teatro, cine o la canción,
desearon inmortalizarse en foto
en más de una ocasión.
Las manos cuidadosas
que fijaban el posado,
miman ahora los pelillos revueltos
de un niño que pregunta
por las cosas de antaño.
- Eran muy distintas - contesta ella -
que antes había que revelar,
componer, retocar y fijar,
y ahora resulta que sólo es disparar.
Y de aquella pequeña tienda en la que trabajó algunos años,
se llevó muchos recuerdos y también muchos abrazos.
Sirva esta prosa rimada
o esta rima mal prosada,
para regalarle una Rosa
en un beso mío enmarcada.
Que de aquellos años de líquido fijador
y de cuarto oscuro sin color,
nació un retoño rosáceo
que te quiere con mucho amor.
Felicidades querida mía
Felicidades querida mía
Estudio fotográfico Arqué (1955-1975)
en la calle San Prudencio - Vitoria.
Autor : Santiago Arina y Albizu
en la calle San Prudencio - Vitoria.
Autor : Santiago Arina y Albizu
Un buen homenaje a los recuerdos del pasado que tantos buenos momentos han dejado en la memoria.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Gracias Rosa, esos recuerdos se impregnan en la memoria para siempre. Me alegro de que te guste.
EliminarBesos desde esa fotografía en blanco y negro.
Laura, bonito homenaje. Destila ternura, cariño y devoción. Las fotografías que se realizaban antes, no sé si eran mejores o peores que las de ahora, lo que si es cierto, es que se realizaban con más atención y utilizando todos los recursos.
ResponderEliminar¡Felicidades por esta magnifica poesía!
Abrazos.
Gracias Nicolás!!.
EliminarEste es un pequeñito y humilde homenaje a todos los que trabajaron en esa tienda de fotografía y en especial : a mi madre.
Un abrazo.
Qué bonito, a mí que me toca de cerca, me ha encantado ver esa foto antigua y los recuerdos. Abrazos
ResponderEliminar¿Te toca de cerca Maite? ¿conociste esa tienda? ¡cuéntame, anda!.
EliminarUn beso fuerte.
Precioso homenaje y maravillosa fotografía. Las fotos antiguas tienen un nosequé, un bien hacer, un cariño, que se nota. Un beso.
ResponderEliminarGracias Mar. Me alegro de que te guste también, a la destinataria le ha encantado.
EliminarUn abrazo.
enhorabuena!
ResponderEliminarsaludos
Gracias Omar.
EliminarUn abrazo.
Esta poesía rebosa ternura y calidez. Vaya felicitación a esa querida tuya, que tiene que ser muy cercana a tí. Felicidades por mi parte a la susodicha y a Laura por hacerlo tan bonito. Qué nostálgicas son las fotos antiguas.
ResponderEliminarMuchísimas gracias Cantarelus, con un poquito de ternura que se haya posado en mis palabras me doy por satisfecha.
EliminarLa nostalgia de esas fotos nos evoca recuerdos que todos tenemos en la memoria. Nuestros hijos viven en color, nosotros aún de vez en cuando soñamos en sepia.
Un abrazo
Laura...no se porqué, pero al leer este poema me han venido a la cabeza unos versos de Carles Riba, que traducidos desde el catalán vienen a decir" las palabras son para entendernos, no para entenderlas". Estos versos tuyos tienen una clave, un código secreto que sólo conoces tú, y la persona a la que van dirigidos, tal vez, por la foto, por el "retoño", por la voz del niño... puede que sean a una abuela, a una madre, o a esa tía-madrina de toda la vida. Sea a quién sea, transmiten esa calidez, ese cariño, esa ternura que escapa a las palabras, a las rimas, a la composición. Las palabras son sólo eso, unas veces bálsamo, otras medicina.
ResponderEliminarBonita flor esa que nos dibujas, a veces la sencillez de una flor es el mas inconmensurable de los regalos.
Un abrazo.
Vas bien encaminado Xavier, y como ya lo dije más arriba, no me importa repetirlo : son para mi madre. Si tú has leído : cariño, ternura y calidez entre mis palabras, me doy por satisfecha. Ella leyó : amor, y también me gustó mucho.
EliminarGRACIAS por lo de la FLORECITA....que a mí estas cositas de los acrílicos y las acuarelas me cuestan, me cuestan, y nunca podría hacer una al día como hace Juanlu, o con la facilidad que dibuja Sara.
Un abrazo también para tí y muchas gracias por tu bonito comentario.
Laura
El título es equívoco, por lo de la superstición de la fecha, pero no el texto: ¡Felicidades!
ResponderEliminarPuedo asegurarte, Francisco, que ha sido un día perfecto, muy lejos de las supersticiones y los malos augurios.
EliminarGracias por tus felicitaciones.
Un homenaje (¿a tu mamá?) precioso, Laura.
ResponderEliminarQue disfrutéis el día como se merece.
Un abrazo.
¡Claro que sí! MJ, eres la más acertada en la incógnita que planteaba.
EliminarLo hemos disfrutado, gracias.
Ellas lo merecen todo (casi todas, claro).
ResponderEliminarLo merecen todo, sí, a mí me gusta pensar que lo merecen. Y me gusta remontarme a los momentos que sé que les hicieron felices.
EliminarMuchas gracias Adivín.
Las fotos en sepia permiten recuperar un tiempo vivido.
ResponderEliminarSi de cumpleaños, con más emoción.
Un abrazo.
Los colores sepias son los de los recuerdos. Esa tienda que ves se cerró hace muchos años pero dejó una huella imborrable en esta ciudad con miles de negativos donados al Ayuntamiento para su Archivo Historico.
EliminarMuchos abrazos.
Se debe merecer mucho para que le escribas así.
ResponderEliminarLaura, un abrazo
Bueno, ¡claro que se lo merece!. Estoy aquí por ella!! ;)
EliminarUn abrazote.
Un homenaje hermoso, Laura. Ignoro a quién va dedicado, pero sea quién sea, dudo mucho que no le haya emocionado.
ResponderEliminarEstas palabras tienen tus sentimientos entretejidas en ellas.
Un abrazo,
Está dedicado a mi madre, Pedro. Trabajó en esa tienda de fotografía, y sus propietarios, Federico Arocena - un gran amigo de la familia - y Gregorio Querejazu, ya fallecido, donaron exactamente : 354.037 fotogramas, conservados hoy en el Archivo Municipal.
EliminarSe ha emocionado, porque esos recuerdos "no duelen" y efectivamente, mis sentimientos estaban visibles entre cada línea de esas palabras.
Un abrazo y muchas gracias a todos.
Como madre me has emocionado, y gustandome como me gusta la fotografía, he recordado aquellos estudios oscuros y el revelado manual de las fotos...
ResponderEliminarParece un soneto encadenado y te ha salido muy bien, alguna vez lo he intentado y es muy dificil,tú lo has conseguido en ritmo medida y verso.
Yo como siempre te mando besicos para ti y para tu madre....Ay, las madres, la mía muy mayor y un poco pachucha estos días.
Hola Cabopá, espero que tu madre se recupere muy pronto porque llega la primavera y seguro que el buen tiempo le animará un poquito ¡ya verás!.
EliminarGracias por tus palabras y me alegro muchísimo de que mi entrada te haya gustado. A ella también le ha gustado mucho, y eso es lo que vale.
No sé si es un soneto pero fluyó de esta forma y cuando las palabras salen así de encadenadas, no acostumbro a detenerme en muchos más arreglos.
Gracias por venir y por dejarme este bonito comentario. Un beso.
Hola Laura me has hecho recordar al único fotógrafo que había en mi pueblo, y todo era como tú lo describes... este recuerdo, ha aflorado al leer tu entrada, no lo había vuelto a recordar... me encantan las fotos antiguas, y sobre todo las que tienen ese color sepia, que destila tiempos idos. Hermosa entrada.
ResponderEliminarMi cariño con un abrazo
Gracias Angeles, viniendo de tí con las marivillosas perlas que relucen en tu blog, me siento muy afortunada por este comentario.
EliminarGracias por acercarte y recibe un abrazo muy fuerte.
Un bonito homenaje, a quien seguramente ocupa un lugar muy especial en tu vida.
ResponderEliminarGracias por compartirlo.
Abrazos alados!
Lo ocupa Diana, y muy grande.
EliminarGracias a tí por dejar tu comentario y tus abrazos alados.
Vayan unos besos por el aire para ti.
Tu madre se habrá sentido muy orgullosa al leerlo. Bonita foto y entrañable entrada.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Chelo, claro que se sintió muy contenta, y esa foto le trajo muy buenos recuerdos.
EliminarAbrazos para tí.
un buen homenaje, saludos
ResponderEliminarOtro saludo para tí, Omar.
EliminarEs un magnífico homenaje, de esos que todos querríamos recibir.
ResponderEliminarUn beso.
HD
Gracias Humberto,
Eliminaryo creo que los pequeños homenajes, grandes o medianos, son del todo siempre bien recibidos, en prosa, en verso, en foto o en acrílico.
Un abrazo.
Las palabras de este poema destila amor y orgullo, se nota al leerlo lo importante que es esa persona para ti, ahora ya sé que es tu madre. Me imagino lo emocionada que se ha debido sentir.
ResponderEliminarAl ver la foto he pensado, por las fechas, vivi en Vitoria en el 72, que más de una vez pasaría cerca de ese estudio de fotos.
Besitos
Sí, Elysa, le gustó mucho. Pasarías cerca porque esa calle es perpendicular a la calle Dato, o sea en el mismísimo centro de antes, y de ahora. ¡No sabes todo lo que ha cambiado la ciudad Elysa!, o bueno, igual sí lo sabes, pero ahora no tiene nada que ver con todo lo que entonces viste. Es cierto, seguramente como la mayoría de ciudades españolas.
EliminarUn abrazo Elysa y un beso.
¡Qué gozada de poema, Laura! Me ha gustado mucho mucho, y más con esa rosa pintada :)
ResponderEliminarUn estupendo regalo, sin duda.
Besos y abrazos a mogollón.