Entre dos vidas
Marielo había sido la mujer de su vida. Su pelo ondulado, de rizos naturales, igual que la enredadera que decide vivir en el tronco de un árbol, le había atrapado el corazón. Era su musa inspiradora de grandes poemas, de más de mil cartas de enamorado, y el artífice de todas sus pasiones.
Noelia, a la que un día quiso sin amor, de pelo liso y desconsolado, le embuía en las tristezas de una vida incómoda, siempre complaciente y servil con sus deseos. Ambas cantaban distintas canciones. Jazz y Soul por los labios ardientes de Marielo. Tonadillas de requiems de Mozart en la boca cerrada de Noelia. Veían el mundo con muy distintos colores. Turquesa, Marielo. Gris, Noelia. Él luchaba con todas sus fuerzas por el amor incondicional de Marielo resistiéndose a perder para siempre a Noelia.
Un día de verano, seco como el desierto, se encontraron en el bosque las dos mujeres. y Marielo, impulsada por un arrebato de pasión, enredó con su pelo la garganta de Noelia ofreciéndole una muerte dulce con olor afrutado. Creyó que así disfrutaría plenamente del amor de aquel hombre. Pero Mariano, al enterarse de tal atropello, quedó hundido en el suelo, postrado en sus penas, ahogándose en su propio llanto y sólo acertó a decir :
- ¿Qué has hecho? ¡mujer mía!, ¿por qué has matado a mi madre, aunque ya no la quería?.
Qué tremenda giro final!!!!! Me ha dejado sin aire...
ResponderEliminarUn abrazo admirado, Laura
Es curioso comprobar que una misma imagen inspire tan variados y diferentes textos. El tuyo, Laura, me ha parecido muy original. La lucha entre dos amores: el maternal y el pasional.
ResponderEliminarUn beso.
El amor es exclusivista, absorbente... nada sorprende, sino el mismo amor.
ResponderEliminar¡Muy bueno, Laura!
ResponderEliminarYa vi la magnífica ilustración de Juanlu en el blog de MJ, su relato me encantó, y el tuyo, tan distinto, también. Ese final, aunque terrible, invita a la sonrisa.
Un abrazo
Un micro con un final excelente. tal como deben ser los relatos. o sus finales...
ResponderEliminarLo he disfrutado.
Un abrazo.
Un gran relato con un final duro, triste. No deja de sorprender como puede haber quienes no entiendan que el amor no se consigue, sólo se recibe y se recibe tanto como te quieran dar y nunca más.
ResponderEliminarUn abrazo, Laura.
Hola Patricia, a menudo dar una vuelta al relato al final del todo y con poquitas palabras por lo limitado del texto, permite acabar con una frase que como dices : lo gira todo. Muchas gracias por estar siempre por aquí.
ResponderEliminarHola MJ, es cierto. Leí muchas de las historias que se publicaron y quedé asombrada de la disparidad de ideas. Sin ninguna duda una de las cosas que nos diferencia de los animales es la creatividad. Un beso para tí.
Gracias Francisco. El amor es ... ¿todo?.
Muchos abrazos.
Hola Ximo, si me dices que arranca una mini sonrisa : ¡me doy por satisfecha!. Con lo difícil que me parece hacer lo que tú haces. Muchísimas gracias.
Muchas gracias Moderato, me alegro mucho de haberte hecho disfrutar unos pocos segundos de tu vida. Un abrazo también para tí.
Buenas Pedro, qué gran mensaje el tuyo. El amor no es una compra-venta. Me alegro de verte por aquí de nuevo, y poder compartir estos micro-ratitos.
ResponderEliminarUn abrazo para tí.
Enhorabuena Laura por darle una genial historia a esta preciosa imagen de Juanlu.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Que preciosa imagen y excelente trama con un final sorprendente como tiene que ser un buen cuento.
ResponderEliminarTe felicito.
Me quedo como seguidora
Te invito cuando quieras a visitar mi sitio
lujanfraix.blogspot.com
Espero que te guste.
Un beso
Gracias Rosa, me alegra mucho que te haya gustado y que te pases por aquí para dejar tu huella. Un abrazo.
ResponderEliminarBienvenida Luján, me alegro de que hayas disfrutado con imágen y cuento. Has hecho un buen número de seguidora: el ¡ setenta !, y eso me hace pensar que jamás imaginé el 2 de octubre, que tantas personas pudieran estar ahí cerquita. Ahora mismo me paso por tu blog. Recibe un abrazo y muchas gracias.
Lo más sorprende es ese final, inesperado. Mira que nos iban cayendo bien esos amores. En fin , una imagen mil relatos.
ResponderEliminarHola Ximens, cómo me alegra de que te fueran cayendo bien esos dos amores y al final haya podido sorprenderte un poquito.
ResponderEliminarJugar con la mente lectora y dar un giro para terminar de otra forma inesperada es lo que más admiro de quienes escribimos en corto. Tus figuritas de mazapán en la Esfera ("Natividad")....fueron ¡perfectas! para el tema anti-navideño.
Un abrazote.
Hola Laura, estupendo relato, me ha gustado mucho y el final me ha sorprendido, es redondo, muy bien txiki, sigue así. El dibujo es genial y sorprendente también. Un abrazo. Arantza Arana
ResponderEliminarSorprendente interpretación del dibujo de Juanlu. Muy original, Laura y con muy buen final, veía dos mujeres hasta el final que me habla de dos tipos de amor.
ResponderEliminarBesitos
¡ Hola Arantza !, qué suerte la mía de encontrarte entre estos comentarios. Me hace muchísima ilusión poner cara cercana a quien me escribe. Gracias de verdad por pasarte por aquí. (Sí, el dibujo de Juanlu es genial). ;-)
ResponderEliminarUn beso para tí.
Hola Elysa, yo creo que hay tantas interpretaciones como cabezas se pongan a pensar. Me encanta escribir a partir de una imágen. Creo que me voy a hacer imágen-adicta o algo parecido.
Muchos besos también para tí.