Atendiendo a las súplicas de un chavalín de ocho años, haré hoy una excepción y publicaré durante unas horas, durante esta noche y parte de mañana, una mini historia terrorífica salida espontáneamente de su cuaderno de escritura, con el ánimo de que os echéis a temblar y os asustéis mucho......
Por supuesto que me desentiendo de cualquier conexión profética que alguien pudiera imaginar.
Sabed que es original, en todas sus comas y palabras, sin intervención humana alguna.
Y comprender, que el ánimo no es otro que recompensar a quien desea escribir desde su más tierna infancia.
Cuando la raza humana se extingue, la Tierra se queda deshabitada y todos los treinta y uno de octubre, los muertos se levantan de sus tumbas y van andando por las calles derruidas. Cuando los animales los ven, salen corriendo al ver las calaveras : cavernosas, frías y blancas. Así, año tras año, hasta que el sol explote y nuestro planeta salga despedido de la Vía Láctea buscando nuevas vidas.
De niña me encantaban las historias de terror, aunque luego no podía dormir del espanto.
ResponderEliminarAbrazos alados Laura, Buen inicio de semana!
Entrañable el pibe.
ResponderEliminarTiene la misma madera que su madre.
Gracias Diana. Yo tampoco dormía y me metía debajo de las sábanas. Un abrazo.
ResponderEliminarDel pibe, querida Adela, nadie dijo que yo fuera .... su madre ... (Gracias ;-) y un abrazo desdemispalabras).
Fantástica, la historia. Ocho años, madre mía. Llegará más lejos que la tierra en su relato.
ResponderEliminarDos besicos.
La idea de un planeta vagando por el espacio sin rumbo fijo ni estrella sí que me parece terrorífica - y creo que puede ocurrir -.
ResponderEliminarBuena imaginación.
Gracias Miguel Angel, en su nombre, que sé que le hará ilusión cuando pueda leerlo. Es un detalle muy grande que hayas comentado esta entrada. Abrazos desdemispalabras.
ResponderEliminarHola Javier, esperemos que no ocurra mientras vivamos ... pasaré por tus delirios a ver qué te cuentas. Gracias.
¡Oye, Laura! pues dile que no está nada mal, imaginativo y ciertamente muy terrorifico, de verdad, por esa sensación que deja de final total.
ResponderEliminarBesitos a ambos
Ya el niño apunta maneras.
ResponderEliminarDale un beso y que siga escribiendo que llegará lejos.
Hola Elysa, mejor no le animo mucho, que luego se lo cree demasiado, se lo toma demasiado en serio y me quita el sitio en este blog ...
ResponderEliminarEl beso se lo doy ahora, muchas gracias Juglar.
Un abrazo y buenas noches.
Muy bueno, la imaginación del niño es estupenda. Me ha gustado el final, ha dado de lleno.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias en nombre del niño (pibe) a todos :
ResponderEliminarDiana, Adela, Miguel Angel, Javier, Elysa, Juglar, y Rublo.
Le ha hecho mucha ilusión recibir vuestros amables comentarios. Cree que va a seguir escribiendo.
Besitos